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Descubriendo la magia del Mediterráneo: Un viaje a través de sus tesoros ocultos

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Realizar un viaje por los destinos y lugares más representativos del mar Mediterráneo en un crucero siempre es una buena manera de disfrutar de las vacaciones. Es decir, viajar a las ciudades más importantes, como Roma, Barcelona, Atenas, Marsella, entre otras es apostar por hacer un viaje que vas a disfrutar al máximo. Después de todo, ¿quién no conoce el Coliseo y el Foro Romano o la Fontana de Trevi en Roma? ¿Quién no conoce los templos de la Acrópolis de Atenas, como el Partenón o el Erecteion? 

Del mismo modo, es prácticamente imposible encontrar a alguien que no haya escuchado hablar nunca de la basílica de La Sagrada Familia de Barcelona. Es decir, que, al viajar por las costas en un crucero, puedes encontrar grandes tesoros del Mediterráneo que podrás disfrutar desde el punto de vista turístico, hacerte fotos y vivir una experiencia única y totalmente agradable. 

No obstante, también debemos admitir que existen otros rincones del Mediterráneo que no son tan conocidos, pero que merece mucho la pena visitar. Estamos hablando de lugares que se encuentran más apartados de las zonas de turismo, por lo que suelen ser más naturales, tranquilos y no se encuentran repletos de gente. Por este motivo, en este artículo vamos a mostrarte que puedes ver en un crucero por los tesoros del Mediterráneo que no se ven tan a menudo. 

Basílica de San Pietro in Vincoli, Roma

Roma es un lugar mundialmente conocido por sus grandes monumentos de la antigüedad, como el Coliseo, el foro romano, los arcos de Tito y de Constantino, la columna del emperador Trajano. Del mismo modo es una ciudad conocida por albergar las grandes obras de pintores, escultores y arquitectos del periodo del renacimiento, del barroco o del neoclasicismo. Sin embargo, lo cierto es que contiene tesoros del Mediterráneo que, aunque no son tan conocidos, no te puedes perder. Entre ellos, por ejemplo, debemos recomendarte la Basílica de San Pietro in Vincoli. 

Se trata de un templo que destaca por su sencillez y por la austeridad en cuanto a la decoración. Su altar mayor contiene un relicario que custodia las cadenas de San Pedro, que se consideran el principal atractivo de la iglesia para los turistas. Asimismo, también se puede ver un fresco bastante curioso, ya que contiene representaciones de esqueletos e imágenes que no son muy comunes de ver en una iglesia. 

Sin embargo, este templo esconde el maravilloso mausoleo del Papa Julio II, que contiene una de las obras maestras de Miguel Ángel: el Moisés. De hecho, muchos turistas que entran por curiosidad en esta basílica se encuentran por sorpresa con esta obra, que se considera una de las obras cumbre del renacimiento, dentro de la escultura del periodo del Cinqueccento.

La Gruta Azul (Blue Grotto), isla de Malta

Cuando hablamos de la isla de Malta, es imposible no pensar en la maravillosa y asombrosa ciudad de La Valeta, que se encuentra declarada Patrimonio de la Humanidad. Sin embargo, esta isla contiene tesoros del Mediterráneo que no te puedes perder, pese a que sean menos conocidos por los turistas.

Entre estos lugares, debemos nombrar la Gruta Azul, que se encuentra en la costa opuesta a donde se ubica La Valeta. Esta gruta está formada por una serie de cuevas marinas que se pueden acceder a bordo de pequeñas embarcaciones pesqueras a las que se puede acceder desde el puerto de Wied Iz Zurrieq. 

Estas cuevas o grutas marinas tienen un aspecto muy interesante gracias a sus aguas de un impresionante color azul. Además, la visita permite el acceso a un mirador, al que merece la pena acudir desde la mañana hasta la 1 del mediodía. Esto se debe a que, a esta hora, gracias a la incidencia de la luz, los colores azules al incidir sobre las rocas y el agua del mar se muestran muy intensos. Sin duda, un lugar imprescindible si quieres hacer un crucero por los tesoros del Mediterráneo.

Las cuevas del Drach, en Porto Cristo, isla de Mallorca

Cuando hablamos de esta isla española, lo primero que nos viene a la mente son los monumentos de su capital, Palma de Mallorca. En esta ciudad se pueden ver monumentos y edificios impresionantes desde el punto de vista turístico, que forman parte del patrimonio histórico y artístico de la isla. Entre ellos, podemos destacar la Catedral-Basílica de Santa María de Mallorca, el Castillo Bellver, el Palacio Real de la Almudaina o la Lonja. 

No obstante, a una hora de camino, puedes visitar un rincón tan impresionante como las cuevas del Drach, en el municipio de Porto Cristo, en la costa este de la isla. En ellas, puedes visitar una ruta de hasta 25 metros de profundidad, que es todo un espectáculo de la naturaleza. Destacan las formaciones de estalactitas y estalagmitas, así como los lagos subterráneos e iluminados de tal manera que es imposible no disfrutar. Sin lugar a dudas uno de los tesoros Mediterráneo menos conocidos que debes visitar. 

La Canea (Ta Janiá), isla de Creta

Muchas de las personas que han visitado la isla de Creta, tienen en mente la pequeña, pero impresionante ciudad de Heraklion, que es conocida, entre otras cosas, por la Fortaleza de Koules y el Palacio de Knossos, considerado el mejor conservado de la antigüedad. No obstante, la Canea, aunque es una ciudad menos conocida, es uno de los tesoros del Mediterráneo.

La Canea es la segunda ciudad más importante de la isla y es conocida bajo el sobrenombre de “La Venecia de Oriente”. Se caracteriza por ser una urbe multicultural con mucha vida con bastantes rasgos que evidencian el dominio de los venecianos y los otomanos en esta parte de la isla. 

Se encuentra repleta de rincones coloridos con mucho encanto que puedes ver tan sólo con pasear entre sus calles. Entre ellos, podemos encontrar sus múltiples barrios, su casco antiguo, sus murallas y su puerto. Del mismo modo, debemos nombrar rincones atractivos desde el punto de vista turístico, como la Mezquita de jenízaros, el faro egipcio, la Fortaleza de Frikas y las iglesias de San Nicolás y la de Agioi Anargyroi. 

La mítica isla de ítaca (Ithaki), Islas Jónicas (Grecia)

En Grecia existen múltiples lugares de gran interés turístico, como la ciudad de Atenas, con la Acrópolis y las islas griegas más conocidas, como, por ejemplo, Santorini o Mykonos, entre muchas otras. Sin embargo, si estás buscando realizar un crucero por los tesoros del Mediterráneo, no te puedes perder una visita por la isla de Ítaca. 

Se trata de una isla de tamaño reducido que es conocida en la mitología griega como el lugar de origen del héroe Odiseo / Ulises, protagonista de la Odisea de Homero. Físicamente, esta isla, que se caracteriza por unos paisajes de aspecto abrupto, de acantilados verticales y paredes rocosas. No obstante, gracias a la Odisea, es conocida en todo el mundo. 

Sin embargo, debido a las características de su terreno, Ítaca es un lugar poco atractivo desde el punto de vista turístico de sol y playa, por lo que, aunque esto no quiere decir que sea menos interesante ni disfrutable. De hecho, gran parte del terreno de la isla se encuentra en estado salvaje, donde puedes tener la oportunidad de disfrutar de la naturaleza salvaje y de sus pequeñas calas de piedra sin encontrarte con mares de turistas. Por lo tanto, es uno de los tesoros del Mediterráneo que, sin lugar a dudas, disfrutarás en tu viaje. 

Castillo de If, Marsella

Marsella es una ciudad muy disfrutable desde el punto de vista turístico, ya que contiene importantes e impresionantes edificios que visitar desde el punto de vista turístico. Entre ellas, podemos encontrar la famosa basílica de Notre Dame de la Garde, la Catedral de Marsella o la Abadía de San Víctor. 

No obstante, esta ciudad también tiene otros lugares menos conocidos, que también son importantes. Entre ellos, por ejemplo, se encuentra el Castillo de If, una fortificación francesa que fue erigida a mediados del siglo XVI en una isla de tamaño reducido que forma parte del archipiélago de Frioul, en la propia bahía de Marsella. Se cree que fue construido para vigilar la ciudad de Marsella y defenderla de los ataques, aunque posteriormente se convirtió en una prisión. En la actualidad se ha habilitado como lugar de atracción turística. 

Para finalizar, podemos decir que estos sólo son algunos de los tesoros del Mediterráneo que ver en un crucero a lo largo de las espectaculares costas de este mar, pero a lo largo y ancho de este mar, puedes encontrar rincones increíbles menos conocidos. Es decir, mientras las ciudades emblemáticas atraen a multitudes, estos rincones menos conocidos ofrecen experiencias distintas y auténticas. Desde la basílica de San Pietro in Vincoli en Roma hasta la Gruta Azul, de Malta, y las cuevas del Drach en Mallorca, cada destino es una joya por descubrir. Explorar estos tesoros es adentrarse en la auténtica magia del Mediterráneo, donde la historia y la naturaleza se entrelazan para ofrecerte una experiencia inolvidable en un crucero por los tesoros del Mediterráneo.

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